«¿Y tú? ¿Has cerrado ya libros terminados o todavía te regocijas en sus páginas y no parecen acabarse nunca?»
6 de agosto de 2021
¿Has cerrado los ojos o los has abierto? ¿Has oído el inconfundible sonido de la llamada de esas páginas? ¿Has esperado siempre a ese momento perfecto que nunca llega? ¿O has decidido que ahora es tan buen momento como cualquier otro?
¿Has estado permeable, dispuesta con ganas? ¿Has dejado que el calor te aletargara y en mitad del letargo apareciese una página salvadora? ¿Has apreciado esa lectura casual aunque no fuese el momento, o precisamente porque lo fue? ¿Has decidido que bueno, que no era para tanto, que no ha estado mal pero es bastante prescindible? ¿Has pensado en empezar otra cosa, dejar a medias, abandonar, engancharte a otra cosa? ¿O has estado olvidando todo eso?
¿Ha transcurrido el tiempo a otra velocidad? ¿Has ralentizado o acelerado el curso de una tarde, de una mañana, de una espera, solo por esas palabras? ¿Has dejado el libro de lado cuando más te lo pedía o cuando menos lo necesitabas? ¿Has atascado el dedo entre dos cantos para no perderte, solo será un momento, y lo has rescatado para seguir por donde ibas? ¿Has abandonado toda cordura para llenarte, llenarte y más llenarte? ¿O te has saciado ya, a estas alturas?
¿Has tropezado con tus propias palabras? ¿Has corrido a refugiarte en una página en blanco mientras las otras rebotaban contra ti todavía, te perseguían, gritaban tu nombre y se quedaban a vivir en tus sueños? ¿Has confiado en la palabra propia para que dejaran de atormentante las ajenas, para que saliesen de ti como fuera y dejaran de presentarte las mismas imágenes una y otra vez? ¿Has machacado la misma frase por aburrimiento para acabar volviendo a ella, que viviese en ti? ¿O nada de eso ha ocurrido?
¿Has cerrado los ojos o los has abierto?