A menos de dos semanas para el examen del EIR me apetecía escribir por aquí algunas cosas.
No sé a estas alturas si lo llevo bien, mal, si la cosa va regular… Sé que he estudiado, que me he esforzado mucho, que he hecho todo lo posible. Pero también sé que arrastro un cansancio infinito con respecto al tema del examen desde hace mucho tiempo. Por mucha rabia que tuviese en el anterior examen con el resultado, por más que la haya usado como combustible para estudiar muchas veces, siento que no termina de ser suficiente. Y ahora, justo a menos de dos semanas del EIR, no sé si es que se me ha agotado el combustible o es ya un agotamiento con el tema de la especialidad que se ha convertido en crónico. Supongo que también tiene algo de acumulativo.
No sé qué pasará en ese día, dentro de dos semanas. No sé si haré el examen de mi vida o si me pasará lo habitual, una buena prueba pero que nunca es suficiente. Y por una vez creo que afronto esa fecha con otro temple, con la seguridad de que si no es suficiente, si no lo consigo, va a ser igualmente un alivio. Quitarme la espinita clavada después del año pasado va a ser seguro eso, calma y paz mental. Pero más allá de eso, pase lo que pase, voy con la tranquilidad de que voy a pasar página. Para bien o para mal.
En esta mi última oportunidad del EIR me apetecía dejar por escrito una serie de cosas. La pandemia y la vacante que firmé el pasado septiembre me han ayudado a tener todo más claro:
- Sí que será mi último intento. No, no voy a volver años después a esto. Ya me he dado cuenta más que de sobra que el agotamiento es acumulativo y que a estas alturas de la vida ya casi me voy arrastrando al escritorio para la sesión diaria de estudio. No puedo más con el mismo temario. Pase lo que pase aquí va a acabar.
- No voy a escribir entrada del post-EIR. A menos que firme una plaza no habrá una entrada específica sobre el tema. Como mucho, algún comentario. Sinceramente, a estas alturas y con tantos intentos no se me ocurre qué decir.
- Tengo otros planes, más allá de lo que pase. Como dije en una de las primeras entradas de este año, aspiro a ser un Sim del Renacimiento. Si algo bueno ha tenido la pandemia ha sido eso, redescubrirme. Y pienso poner en práctica mis ilusiones y aprender de otros temas.
Además, el cambio de rotatorio que hicimos a principios de mes me ha sentado muy bien. Siento que a mis días le saco aún más jugo que antes, así que a lo único que aspiro ahora es a disfrutarlos y aprovecharlos al máximo.
El próximo 27 de marzo iré a hacer el examen y ya veremos qué pasa. Pero tanto antes como después tengo muy claro que estaré tranquila. Lo he hecho bien, lo he hecho lo mejor posible. Y siete intentos son suficientes como para saber que hasta aquí hemos llegado, sea cual sea la meta final.
Admito que, sea cual sea el resultado, tu reflexión post-EIR me parecería especialmente interesante sabiendo que es La Última, con mayúsculas. Si no escribes al respecto, avísame cuándo es aceptable que te pregunte: eres una de las personas más tenaces que conozco cuando se ha tratado de preparar una oposición y, la verdad, tu perspectiva vale su peso en oro.
A ver, post-EIR como tal estoy segura que no escribiré, pero una entrada final despidiendo el proceso es posible que la haga. Cuando sepa número de orden, adjunten plazas, etc. Sé que puede resultar interesante por tantos intentos.
Un saludo, nos leemos.