Conforme más se acercaba noviembre menos claro tenía lo que quería escribir. Ya que se acabó el NaNoWriMo puedo decir: he escrito justo lo que necesitaba.
Desde el verano tuve claro, muy claro, que durante mi reto literario favorito del año quería aprovechar para escribir Proyecto CV. Tenía algunas nociones de lo que quería hacer y mi idea era esos meses previos planificar todo para poder escribir, si no de un tirón al menos casi, todo el proyecto en sí.
Algo que me ha ido pasando a lo largo de esos meses planificando, tachando ideas, descartando y quedándome con otras es que una cosa era mi intención y otra lo que iba a escribir en realidad. Me veía perdida, cada vez más perdida, conforme iban avanzando las fechas del calendario y acercándose el día 1 de noviembre. Porque una cosa era mi intención de escribir, mis ganas, y otra cosa el punto en el que realmente estaba el proyecto: no estaba lo suficientemente maduro como para poder escribirlo en sí. Y con cada día que pasaba quedaba más y más claro en cada sesión de escritura que trataba de abordarlo.
Aceptar esto, que no era el momento de sentarme a escribir en sí el proyecto, ha sido duro. Para qué mentir. Pero a lo largo de estos meses de verano no he sido capaz, por motivos de salud, de avanzar más en el tema así que llegaba el momento de la verdad y no tenía nada sólido a lo que agarrarme. Decidir tirarme a la piscina a ver qué pasaba no era una opción, ya lo he probado otras veces y no ha servido más que para frustrarme y no llegar a ninguna parte. Tocaba asumir que lo que tocaba era repensar el NaNoWriMo y eso hice.
Este año he escrito Proyecto CV, sí. O, mejor dicho: entre todo lo que he ido escribiendo a lo largo de este mes de noviembre he ido avanzando Proyecto CV. Pero en realidad, más que escribir el proyecto en sí, he ido construyendo un borrador plagado de apartados donde he ido recopilando toda la documentación que tenía (que no es poca y aún me quedan unos cuantos libros por leer), la escaleta de cómo quiero desarrollar el proyecto en sí y una guía de cosas importantes a tener en cuenta conforme escriba.
Ha terminado siendo un documento repleto de información y notas, lo más complejo que he creado hasta ahora, y mi intención a lo largo del próximo mes de diciembre (hasta la fecha de parto, más o menos) era ir corrigiendo todo eso que tengo e irlo puliendo para, en un futuro posparto, comenzar lo que es la escritura de Proyecto CV en sí. La primera de esas correcciones ya la he acabado y de momento me ha dejado un muy buen sabor de boca. Promete.
Muchos pasos, sí. Muchas capas. Nada nuevo, sé que esa es mi forma de escribir, lo que me funciona. Masticar y darle tantas vueltas a todo que para cuando lo escriba y lo pula esté todo tan trabajado que no se me escape nada.
Queda Proyecto CV para rato. Seguramente sea mi gran proyecto literario de 2024. Pero me gusta que así sea, no tengo ninguna prisa y solo quiero que salga el mejor libro posible.