He encontrado una nueva inspiración. Una nueva pieza de puzle que hace encajar mis esquemas de la que fui y la que empezó a escribir estas líneas hace años.
Hoy en día no sé qué hacer con esta pieza.
Me inspira enormemente, sigue haciéndolo. Mentalmente casi que ha solucionado la mitad de las preguntas que tenía en mi cabeza desde hace semanas y que me impedían continuar con la escritura. Es una pieza muy interesante, intensa y llena de posibilidades, sin duda, muy tentadora de ser incluida en este intento actual de escritura del proyecto. Me encanta por todo lo que me ofrece, por todas las vueltas que le llevo dando a la cabeza desde que apareció ante mis ojos, a modo de respuesta inesperada.
Solo hay una pega con ella: no me termina de encajar en lo que tengo entre manos en estos instantes.
Ante mí se abre el dilema: ¿rehacer —y crear una nueva capa más en esta cebolla— para incluir esta pieza? ¿O seguir el camino que voy trazando desde hace un tiempo mientras la tengo en la recámara, para usarla —o no— más adelante? ¿Tenerla o no tenerla presente?
Las dudas me acompañan. Todo el trabajo de este otoño ha sido recopilarme a lo largo de los años. Rastrearme, incluso. Las ideas de las que se nutre este proyecto forman una espiral y cada vuelta incluye de alguna manera la anterior. Tengo muchísima información, esparcida a lo largo de los años y los aprendizajes, que coincide en muchos puntos y en otros muchos crece, crece y sigue creciendo, formando una estructura intrincada.
Da igual el año o el cuaderno que mire de los veintiocho cuadernos —incluyendo el actual— escritos desde 2009: en todos hay algo. En todos la semilla lleva su camino.
Esta pieza me está cuestionando esa trayectoria y a mí misma. No paro de darle vueltas a tantas cosas que daba por intuidas o supuestas que no sé bien hacia dónde continuar a partir de ahora. Me va a tocar descubrirlo a lo largo de la escritura.
Intuyo, pues, que me queda todavía por delante meses de trabajo y lectura. Esta pieza que he encontrado no hace más que confirmármelo y recordarlo. CV seguirá siendo mi gran proyecto de escritura este próximo año, después de todo. En qué dirección seguirá es lo que todavía no tengo claro del todo.