Recortar. Eliminar. Saber que no todo vale, no todo sirve. Desbridar para quedarme con los poemas necesarios, ni más ni menos.
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Cuaderno número catorce
Cerrar un cuaderno que se acaba no es solo que un puñado de páginas estén rellenas, es a veces también cerrar etapas. Así se comienzan las siguientes con mayor ganas y una orientación más clara.
Mi colección de plumas
Hace ya algunos añitos que empecé a escribir con pluma. Estética aparte, es de esas decisiones que no me arrepiento de haber tomado: gané en comodidad a la hora de escribir y, además, me permite evitar las tan temidas tendinitis de muñeca mientras experimento con colores diversos en el cuaderno.
Con e de elegir
Tiendo a dividir. Como si fuesen los capítulos de un libro. O las entradas de un diario. O las canciones de un disco.