Cada vez falta menos para que salga la convocatoria del próximo examen EIR, MIR, BIR, QIR, FIR, PIR y RFIR en el BOE. Mientras nos impacientamos y esperamos para saber los detalles de este año, las sorpresas, el número de plazas definitivo y las fechas de los distintos plazos toca afrontar la vuelta intensiva con todas las ganas del universo.
Esta vez va a ser el intento más duro para mí de todos los hechos hasta la fecha.
Nadie dijo que fuese fácil sacarte un examen de este tipo. Mucho menos cuando, además de jugarte un sueño, lo compaginas con tu trabajo diario. Además, como a una que yo me sé suele estar haciendo mil cosas a la vez, he decidido apuntarme a valenciano (a ver si me saco el Elemental -B1-).
Pretendo también seguir escribiendo, pero no os mentiré, he bajado bastante el ritmo desde que empecé con la segunda vuelta, la intensiva, el lunes de la semana pasada. No es que vaya a dejar el tecleo de aquí a febrero, de hecho el NaNo planea en el horizonte con más fuerza que antes, pero he decidido centrarme en el estudio, escribir lo mínimo y centrar mis esfuerzos creativos para ese mes de noviembre.
Segunda vuelta. Intensivo.
Ya ha empezado lo bueno. Primeros temas de la academia recibidos, orientaciones, llamadas del tutor (me tocó el mismo que el año pasado), mails, etc.
Ya me ha tocado enfrentarme ya a los apuntes, resúmenes (menos mal que los tenía acumulados de la convocatoria anterior) y al hecho de memorizar detalles y volver a hacer simulacros. De momento no voy mal, tengo la inmensa sensación de que está siendo un repaso en profundidad, pero un repaso a fin de cuentas. No quiero confiarme porque luego pasa lo que pasa, mi objetivo es esforzarme todo lo posible.
Como las horas son las que son y no tengo más me divido la meta semanal (el o los temas en cuestión que toquen) en otras más pequeñas y accesibles, ayudándome de esas orientaciones recibidas. La verdad es que, a pesar de la presión por tantas cosas a hacer están siendo de momento días relajados, voy llegando a mis metas y voy trabajando poco a poco, sin perder el ritmo. Sienta muy bien eso de ir cumpliendo poco a poco, de forma constante.
Menos mal que julio y agosto no los pasé cruzada de brazos y ahora puedo decir que la rutina de estudio la tengo bien integrada con los turnos rotatorios del hospital.
Espacio de estudio.
No sé si el hecho de haber cambiado el espacio de estudio me está ayudando también a centrarme o no, pero supongo que algo hará. No es exactamente el mismo donde estudié las convocatorias anteriores, he acondicionado mejor mi rincón en casa para estar más cóma y me noto, con todo más a mano, que rindo más.
De momento no estoy pisando la biblioteca tanto como el año pasado, pero también es comprensible: esas horas por la mañana o por la tarde son las que paso en el hospital, después de eso me apetece más estar en casa y no tener que moverme para estudiar. No descarto volver a ella si veo que por cuestiones de horarios me viene mejor, pero de momento no voy mal así.
Espero contaros más cosas interesantes sobre el estudio poco a poco. Nos vamos leyendo, señores.