De antemano quiero pedir disculpas por el retraso. Esto tendría que haberlo subido ayer lunes, pero un turno doble agotador pudo conmigo antes de que llegase siquiera a plantearme acercarme al ordenador para publicarlo.
Día Mundial de la Salud Mental
Ayer, 10 de octubre, se celebró el Día Mundial de la Salud Mental. El lema de este año para celebrar este Día Mundial ha sido: «Soy como tú aunque aún no lo sepas». La idea, sin duda, es aumentar la visibilidad de la salud mental como algo que afecta por igual a toda la población y eliminar estigmas poco a poco.
En diversas páginas, como Enfermera de vocación, el blog de Teresa Pérez (altamente recomendable si te gusta la salud mental y la enfermería), se le dedicó espacio a hablar de este tema.
En Valencia, por cierto, se organizó una actividad solidaria orientada al público en general, consistía en tejer cuadrados de lana en verde para, entre todos los cuadrados que recogiese, confeccionar una manta. Imagino que la idea era hacer ver la «extensión» de la salud mental en la población. De esta iniciativa, por cierto, me enteré por carteles que vi en diversas partes de Valencia capital, cosa que me parece fantástica.
«Soy como tú aunque aún no lo sepas»
El lema de este año me resulta especialmente inspirador. Es una de esas frases que me gustaría tener siempre presente cuando termine siendo especialista (ojalá este EIR sea la definitiva). Educar a la población de que esa persona tiene un problema de salud pero que no deja de ser una persona como cualquier otra me parece vital.
Y esta frase me encantaría también imprimirla en más de una mente y más de dos, las que nos miran a los profesionales que nos gusta esto como «otros locos» porque trabajamos o queremos trabajar en salud mental. Señores, no me sean estrechos de miras: no hay especialidades de primera o segunda, no nos traten de «pobrecitos, no saben elegir», no nos miren raro.
Detrás de esas actitudes, incluyendo las que nos señalan a los profesionales, creo que está el prejuicio y, sobre todo, el miedo que les tienen a este tipo de pacientes. Por encima de todo, son personas y deben ser tratadas como tal, independientemente de sus patologías o síntomas. Por eso veo tan importante esa frase, estas iniciativas, la visibilización de la salud mental: nos afecta a todos.
Una de cada cuatro personas tendrán algún problema mental en su vida, ¿no es una cifra como para empezar a hablar de esto como un problema de salud más, como la diabetes o la hipertensión, en vez de como parte de una historia de miedo o un puñado de clichés? ¿No va siendo hora ya de dejar los estigmas?