Y con esta entrada anuncio, por si alguien se lo ha perdido, que Catenarias está ya disponible.
Podéis entrar ya a la web de Ediciones Medina y conseguir vuestro ejemplar de Catenarias tanto en versión digital como en papel, como prefiráis.
De todos los pasos que he dado con este poemario, sin duda este es el que más vértigo me da. Mi proyecto, mis poemas, los mismos que empezaron siendo notas sueltas en el móvil o en cuadernos, el mismo texto que luego transcribí en Scrivener y amplié hasta completarlo, es ya una realidad. Si bien fue un proceso duro, y ya lo expliqué aquí, fue a la vez relativamente sencillo. Surgía a borbotones, sin freno. Nunca tuve dudas sobre si lo que estaba escribiendo merecía la pena o no, no me lo planteé.
Simplemente escribí. Escribí sin parar, al principio sin darme cuenta, luego soltando de un tirón todo lo que había guardado dentro.
De todas las veces que me enfrenté luego al resultado, de todas las veces que he releído el libro, en todas he sentido el peso de lo escrito. Me he visto reflejada blanco sobre negro, como mirando a un abismo a los ojos. Observar la parte más oscura y profunda. Seleccionar, recortar, podar. Reescribir algunas partes. Nada de eso me dio vértigo por más que doliera, por más que llorara.
Porque las lágrimas salen solas cada vez que me sumerjo de nuevo en Catenarias y su trazado.
Tampoco sentí vértigo cuando empecé a enviarlo a editoriales y esperar respuesta. Es lo mejor que he escrito hasta la fecha y es sincero. ¿Qué más puedo decir al respecto? Cuento mi historia de la pandemia en poesía. Lo que viví y lo que sentí. Escribí a quienes echaba de menos, de quienes me despedí, a quienes añoraba.
Ver que al final le daban a mi poemario la oportunidad que creo que se merece es un sueño, sinceramente.
Ahora, queridos lectores, tenéis entre vuestras manos un pedazo muy importante de mí. Algo que va más allá de los poemas escritos, como comenté aquí. Con el mayor vértigo que he sentido hasta la fecha debo decir que el dolor que quise poner en palabras ya no me pertenece: es todo vuestro. Blanco sobre negro.
Haced con él el trayecto que os dicte vuestra catenaria particular.
PD: ya tenéis disponible la ficha del libro en Goodreads, por si queréis añadirlo a vuestras estanterías.