Mañana, martes 14 de mayo, llegaré a la cifra de los 125 días seguidos de escritura. Y en este punto en el que estoy lo más interesante es volver a ese reto que hice en su día de la mano de Gabriella Literaria.
¿Por qué volver ahora al reto de 100 días de escritura?
En realidad no es que vaya a reiniciar mi contador de días seguidos ni que vaya a planteármelo como un reto. Lo que quiero es retomar esa costumbre de cuando usé el cuaderno de Gabriella de anotar. Llevaba ahí un registro no solo de los días que escribía, también de qué iba escribiendo cada día, si había pasado algo que hubiese modificado mi rutina, si el día había sido bueno o malo, etc.
Eso es exactamente lo que quiero retomar del reto. Siento que me falta algo más de organización para escribir y, teniendo en cuenta las circunstancias, demasiado que araño algo de tiempo cada día para juntar un puñadito de palabras. Con esto quiero hacer de ese rato de escritura algo mucho más consciente y, por qué no, organizado.
Organización para la escritura diaria
Esta vez no voy a optar por comprar otro cuaderno de Gabriella. Aunque me pareció genial, mi idea es prolongar esto más allá de los 100 días que incluye el reto, así que he preferido para eso utilizar un cuadernito de los que se insertan en mi Traveler’s Notebook para anotar ese registro. Estos cuadernitos son pequeños, finitos y ligeros y así sé que no tendré excusas para no llevarlo encima y que cumpla su propósito.
Si algo he aprendido con otro tipo de cuadernos que probé en el pasado para hacer esta misma función es que si el cuaderno es pesado o grande lo acabaré abandonando tarde o temprano.
Revisando, además, mi uso del cuaderno de Gabriella anoté ya los apartados que sé que utilizo y qué es lo que necesito. Así, con un registro del día de escritura, el número de palabras, el tiempo de escritura (eso me abrió mucho los ojos cuando lo contabilicé en su día) y ya la parte libre donde anotar lo que sea relevante de ese día creo que será suficiente. Como mucho, creo que apuntaré también el lugar donde escribo para ver si eso influye o no.
En su momento también hice conteo de las tintas y plumas que usé, pero eso ya lo estoy apuntando desde principios de año en otro calendario pequeñito, más visual, con colores según el día, así que en este cuaderno no creo que aparezca nada de eso.
Espero, con todo esto, al menos tener constancia y saber qué me funciona y qué no en estos momentos, con la maternidad. Creo que puede ser interesante de analizar, sin duda.